Existen varios métodos de detección y medida de la intensidad de una llama. Los más utilizador son los de Ionización y ultravioletas, existiendo otros sistemas, pero menos utilizados.
Ionización
Consiste en un electrodo en contacto con la llama. La conductividad de la llama es menor que la del aire, y esa variación es la que medimos. Se suele utilizar más como detector que como medida de intensidad de llama, y suelen utilizarse como vigilante de llama piloto en mecheros de Fuel-Oil y en mecheros pequeños de gas.
Ultravioletas
Consiste en una ampolla con dos electrodos y rellena de un gas inerte. Cuando la radiación ultravioleta incide sobre el gas este se ioniza y conduce. La gran ventaja de estos detectores es que no son sensibles a las emisiones infrarrojas que producen refractarios y elementos calientes.
Para su correcto funcionamiento se les debe cortar la alimentación varias veces por segundo y también mediante una cortinilla en combinación con la tensión para que el detector se desionice y se apague (cuando está ionizado se puede ver como se ilumina el tubo detector).
Se puede utilizar para medir la intensidad de llama.